La inteligencia artificial y soluciones basadas en analítica ya se están ocupando en empresas y organizaciones en Chile, pero aún hay mucho potencial. Inti Nuñez, experto en innovación y emprendimiento dinámico, explica cuál es el estado de desarrollo de esta tecnología en el país.
Según comenta Inti Núñez, Director de Estrategia de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Concepción y Presidente de Compite Spa, si bien en Chile hay organizaciones que ocupan inteligencia artificial (IA) en sus procesos, su uso en el país es “todavía muy precario. Es mucho menos de lo que se podría ocupar. Se están generando muchos datos, pero aún no tiene la penetración que debiera tener”.
En las áreas donde existe más avance es en marketing digital, operaciones y logística. La inteligencia artificial, explica el experto, “puede ser muy bien utilizada en todas las industrias. Por ejemplo, en la industria de la construcción para eficiencia de costos; en la industria de la salud, para manejo de clientes, match entre especialistas y pacientes, priorización de casos, evitar que la gente asista a los centros de salud si es que no lo necesita, y muchas otras”.
Barreras
Al momento de realizar una transformación digital y, posteriormente, utilizar IA y analítica, uno de los primeros obstáculos es el cambio cultural y la falta de visión, explica el experto. En este escenario, los ejemplos de organizaciones que han implementado esta tecnología, con resultados positivos de aumento de la eficiencia y reducción de costos, juegan un papel importante en demostrar su potencial. “A través de ejemplos rápidamente se abre la luz. La gente puede ver lo que no había visto, se saca el paradigma, se saca esta falta de visión y rápidamente se entiende la importancia”, indica Núñez.
“Alaya tiene muy buenos ejemplos en la acuicultura, en minería, en los cobros en las autopistas. Creo que esos ejemplos en algún minuto toman volumen y las personas los pueden extrapolar a otras áreas”, agrega el experto.
“Es tal la cantidad de información, la cantidad de riqueza que se puede obtener de los datos, que todos estos ejemplos van mostrando algo de la potencia que se puede tener si es que se habilita la inteligencia artificial”, añade. “Hay una serie de preguntas con respuestas que antes no existían y hoy día es muy posible solucionar. Eso es muy potente”.
Efecto pandemia
Durante los años 2020 y 2021 muchas empresas digitalizaron algunas áreas y procesos, lo que implicó un aumento en los datos con que cuentan las organizaciones. “La pandemia fue obligatoria en lo digital, pero no necesariamente en la inteligencia artificial. Esto hizo que la provisión de recursos, de datos, de todo lo que se requiere para hacer inteligencia artificial, haya aumentado”, señala Inti Núñez, quien califica la situación como una oportunidad para dar el paso hacia el uso de soluciones basadas en IA.
Digitalización v/s predicción
Hoy gran parte de las empresas tienen algo de digitalización, indica Núñez. “Todas tienen computadores, algún CRM (customer relationship management), así como todos tenemos un smartphone. Pero una segunda etapa es transformar estas capacidades en productividad. La inteligencia artificial es un segundo piso evolutivo”, aclara.
Gracias a todos los datos que se generan actualmente, “la empresa pueda acceder a otro estadio de desarrollo si es que ocupa la IA eficientemente y la ve como un valor, si le saca partido”, agrega Núñez.
Desafíos
Además del cambio cultural, para comenzar a aplicar inteligencia artificial las empresas necesitan contar con profesionales que entiendan cómo utilizar esta tecnología y modelos: “también es un cambio en capacidades, en conocimiento, en aprendizaje”, dice Inti Núñez.
Futuro
Núñez explica que a través de los ejemplos exitosos de uso de soluciones de analítica basadas en inteligencia artificial y a profesionales cualificados en el tema, las empresas y organizaciones irán adoptando cada vez más esta tecnología. “Este es un tema que va a explotar. Creo que va a ser un cambio rápido y que va a ser un cambio bien impactante”, finaliza.