La pandemia de Covid-19 y sus consecuencias económicas han acelerado la transformación digital de las empresas. Aquellas organizaciones que se han atrevido a adoptar un enfoque guiado por datos, junto con inteligencia artificial, tienen una ventaja competitiva en este contexto.
“Los datos son el petróleo del siglo XXI”, esta frase, acuñada por el matemático británico Clive Humby en el año 2006 y popularizada por la revista The Economist en 2017, cobra cada día más sentido. Hoy los datos, analizados correctamente a través de machine learning e inteligencia artificial, pueden dar una ventaja competitiva a las empresas en tiempos turbulentos.
La consultora estratégica McKinsey estima que en 2025 los flujos de trabajo inteligentes y las interacciones fluidas entre humanos y máquinas probablemente serán tan estándar como el balance general corporativo, y la mayoría de los empleados usarán datos para optimizar casi todos los aspectos de su trabajo.
A pesar de que con la crisis provocada por el Covid-19 las inversiones en innovación en las organizaciones han disminuido, la misma consultora recuerda que en crisis pasadas, las empresas que invirtieron en innovación lograron un crecimiento y un rendimiento superiores después de las dificultades.
La situación de Chile fue analizada por el Data-Driven INDEX del Observatorio Sociedad Digital Unegocios FEN U Chile, AMDD y CustomerTrigger, que encuestó a líderes empresariales del área de marketing. El 72,9% declara “importante” y “crítico” el uso de datos dentro de su organización. Pero en contraste, solo 26,5% estima que sus esfuerzos en Data Driven son “algo avanzados” o “muy avanzados”.
Cómo los datos ayudan a tomar mejores decisiones
“Las organizaciones impulsadas por el conocimiento toman decisiones de forma más analítica. Incorporan análisis, datos y razonamiento en el proceso de toma de decisiones, todos los días”, explica un artículo de Deloitte. “Con datos y análisis en su núcleo, están preparadas para tomar las mejores decisiones de manera eficiente”, agrega, en lugar de guiarse por la intuición.
Para que una organización pueda tomar decisiones en base a la información disponible, es necesario obtener los datos correctos. Estos deben ser procesados por expertos en Data Science que son capaces de desarrollar herramientas inteligentes que superan la capacidad humana para analizar la información.
Los resultados ayudan a “tomar mejores decisiones de negocio, a detectar patrones de comportamiento, a analizar sus procesos internos o a anticipar potenciales problemas”, explicó Luis Polo, Product Manager de Ekon, al medio Interempresas.
Así, gracias a la analítica de datos las empresas pueden predecir resultados de procesos, optimizar etapas de producción y reducir costos, obteniendo una ventaja competitiva en tiempos de crisis.
En Alaya sabemos que existe una gran necesidad de utilizar estos datos en forma correcta, usándolos para optimizar procesos de alto impacto. “Cuando hay que trabajar con 100 o 1.000 variables, la mente humana no es capaz. A eso se dedica Alaya, a ser capaces de predecir utilizando la ciencia de datos”, explica Luis Sepúlveda, fundador de la empresa.
La empresa está desarrollando proyectos donde se aplica analítica de datos en dos verticales de negocio: Data Driven Aquaculture, con soluciones para el área acuícola, y Data Driven Mining, para el área de minería. En ambas áreas el objetivo es sacar el máximo provecho al análisis de datos para optimizar y aumentar la eficiencia de procesos y operaciones.